jueves, 7 de febrero de 2008

Esperan US$ 100 mlls. de inversiones en acuicultura

El Ministerio de la Producción sostiene que el 2008 será el año del despegue de la actividad, porque el año pasado se han dado los mecanismos para el desarrollo de las inversiones.

La acuicultura en nuestro país tiene un escaso nivel de desarrollo comparado con otros países de la región, y está orientada al cultivo de pocas especies. Sin embargo, tenemos un enorme potencial.

Desde hace algún tiempo el Ministerio de la Producción ha venido dando normativas para regular y fomentar la inversión en esta actividad. "Hace poco se han establecido algunas condiciones, porque no puede pedirse una concesión por un determinado tiempo y luego pasen los años y no se realice la inversión. Entonces, se ha establecido –por ejemplo– un calendario para la ejecución efectiva de los compromisos de inversión", explicó el titular del Produce, Rafael Rey.

Para el viceministro de Pesquería, Alfonso Miranda, este será un año clave para la acuicultura, debido a que se han dado una serie de normas que se espera que le den a esta actividad el impulso que requiere para su desarrollo.

Estimó que las inversiones en el 2008 estarían cercanas a los US$ 100 millones, cifra que superará largamente las inversiones del 2007, las que habrían sido de alrededor de US$ 30 millones. "El año pasado se dieron los mecanismos que permitirán facilitar la inversión, por eso consideramos que el presente año será el año del despegue", anotó.

El ministro Rey expresó que el ejemplo de Chile en acuicultura es paradigmático, porque de no exportar nada pasaron a vender US$ 2,000 millones en salmón. "Nosotros no tenemos las condiciones climáticas para cultivar salmón, pero sí para criar trucha, una especie tan aceptada como el salmón en el mundo", indicó.

Sobre las inversiones en el sector, Rafael Rey refirió que para el 2008 existen una serie de inversiones confirmadas, así como también en evaluación. Mencionó –por ejemplo– que algunas empresas mineras están estudiando el desarrollo de proyectos de acuicultura continental, y otras ya los empezaron; también existe interés de empresas pesqueras dirigidas al consumo humano directo, así como de inversionistas extranjeros.

Al respecto, el viceministro Alfonso Miranda indicó que se encuentran en conversación con algunas empresas mineras, básicamente para la producción de trucha, como apoyo de las comunidades campesinas cercanas a los centros mineros.

Pero también, mencionó, hay interés por la zona de selva, especialmente para criar paiche; así como por el litoral peruano. "Hay que encontrar los mecanismos más transparentes para la concesión de áreas de crianza, además de ser promotoras de la inversión", afirmó.

En ese objetivo, explicó, se han reservado 2,600 hectáreas en la zona (litoral) de Casma (Ancash) para el desarrollo de la acuicultura, pero la adjudicación de estas áreas será hecha por licitación pública, para dar mayor transparencia a estos procesos. "Aún estamos elaborando las bases para esa concesión, pero esperamos que este mecanismo, que ya es exitoso en otros países, lo sea acá también y que podamos replicarlo", dijo.

- China es el principal productor del mundo de especies acuícolas.

- Entre los principales productos acuícolas exportados están los langostinos, conchas de abanico y trucha.

- El mercado europeo básicamente es el demandante más importante de concha de abanico; y el mercado norteamericano de los langostinos, pero son mercados complementarios para los productos peruanos.

Rafael Rey expresó que dado el potencial que tenemos, la inversión en acuicultura marcha muy lenta. "Yo animo a los inversionistas a que arriesguen y encontrarán un mercado mundial que crece exponencialmente", remarcó. Indicó que el Produce está habilitando áreas para concesiones, algo que origina, a veces, protestas demagógicas de gente que miente diciendo que se entorpece la pesca artesanal, o que se concesionan bancos naturales, algo que nunca se ha hecho, ni se hará. "Entonces, deben romperse esas posiciones demagógicas para dejar de actuar como el perro del hortelano, diciendo esto es mío, pero no lo aprovecho, ni dejo tampoco que nadie lo aproveche", refirió.

Publication: Diario Gestion
Provider: Diario Gestión
Date: February 7, 2008

Fondos de capital de riesgo sumarían US$ 300 mlls.

Levantarían recursos para luego invertirlos en capital social de empresas de todos los sectores.

La liquidez de los inversionistas institucionales hace necesario crear nuevas oportunidades de inversión.

Existen algunas iniciativas de fondos de inversión de capital de riesgo que están en formación, y si estas ven la luz podrían generarse capitales comprometidos por unos US$ 300 millones, estimó el gerente general de AC Capitales Sociedad Administradora de Fondos de Inversión (SAFI), Lizardo Miranda.

Entre los nuevos fondos de inversión actualmente en el Perú destacan los dedicados a desarrollar inversiones inmobiliarias y capital de riesgo, o "private equity", que están procurando levantar recursos o capitales (para invertir a futuro), afirmó el ejecutivo en diálogo con Gestión.

Entre la fase de levantamiento de recursos o cierre de compromisos de inversión por parte de los inversionistas y la de ejecución de las inversiones por parte de las Sociedades Administradoras de Fondos de Inversión, indicó, puede pasar fácil entre dos y tres años.

La dinámica de los fondos de inversión de capital de riesgo busca una mayor flexibilidad y tener la posibilidad de invertir en diversos sectores de la economía en función de las oportunidades de inversión que identifiquen, comentó Miranda.

"El rubro de la construcción es uno que está en plena bonanza, donde convergen diversas fuentes de dinero buscando desarrollar inversiones, además de las fuentes de financiamiento de bancos y preventas tanto para viviendas como para oficinas", manifestó.

En los fondos de inversión cuya captación de recursos se realiza mediante oferta pública, la limitante principal viene por el lado de la flexibilidad en las inversiones en un determinado objetivo, mientras que en los de oferta privada existe una mayor flexibilidad en términos de las oportunidades de inversión a evaluarse.

"Cuando un fondo de inversión compite con un empresario por una determinada oportunidad de inversión y este empresario puede obrar con mayor flexibilidad, el fondo de inversión pierde competitividad. Entonces, ahí existe una diferencia entre el régimen privado y el régimen público", señaló.

AC Capitales SAFI cuenta con tres fondos de inversión: un fondo inmobiliario, otro especializado en infraestructura y un tercero en agroforestal, precisó.

El fondo de inversión inmobiliario, producto de una fusión de fondos vinculados a este sector, cuenta con US$ 32 millones de capital, y que, se prevé, lo elevará hasta llegar a US$ 75 millones, adelantó.

El fondo de inversión en infraestructura tiene un monto invertido ascendente a US$ 40 millones, el mismo que se preparará para ofrecer un aumento de capital en el futuro, concluyó.

A S/. 775.9 millones ascendió el patrimonio administrado por los fondos de inversión (públicos) a setiembre del 2007, según dio cuenta la Comisión Nacional Supervisora de Empresas y Valores (Conasev).

El número de inversionistas (partícipes) en los fondos de inversión públicos fue de 276 a fines del tercer trimestre del año pasado.

Hace unos tres meses, AC Capitales Sociedad Administradora de Fondos de Inversión (SAFI) lanzó un fondo de inversión en agroindustria y forestal, con un capital inicial comprometido ascendente a unos US$ 50 millones

Publication: Diario Gestion
Provider: Diario Gestión
Date: February 7, 2008

martes, 5 de febrero de 2008

Consorcios de exportación y la internacionalización de las Pyme

La economía peruana viene atravesando por un momento de expansión como consecuencia del crecimiento sostenido de la producción y de las exportaciones con valor agregado.

En este escenario es indispensable desarrollar una estrategia que impulse una mayor internacionalización de las empresas, en especial las pequeñas y medianas, por el impacto positivo que tiene en su desarrollo al incrementar su capacidad productiva y sus estándares de calidad.

Ello es importante porque nuestro país viene implementando aceleradamente la apertura comercial, a través de Tratados de Libre Comercio, que nos permitan ampliar mercados, lo que obliga a que las empresas sean cada vez más competitivas.

La internacionalización es un proceso gradual, teniendo como componente básico el nivel de compromiso de las empresas con los nuevos clientes, que irá creciendo conforme se incremente el conocimiento de las particularidades y las exigencias que impone este nuevo mercado.

Es necesario, en ese sentido, apoyar a las empresas para que aprovechen eficazmente de los acuerdos comerciales y de esta manera exista en el mediano plazo un mayor número de empresas exportadoras. Un mecanismo eficiente que ha funcionado en otros países es la formación de consorcios de exportación.

En el Perú, las Pequeñas y Medianas Empresas (Pyme) representan más del 80% de la PEA ocupada y 90% del empleo total del sector privado. Esta capacidad de generar empleo se explica porque crear un empleo cuesta menos en una Pyme que en una empresa de mayor tamaño.

Asimismo, es conocido que las Pyme llegan a ser alrededor del 95% del total de empresas existentes en el país, por lo que se tiene en este sector un importante potencial exportador, que debemos impulsar de manera sostenida.

A pesar de su presencia en la economía, las Pyme deben hacer frente a diversos obstáculos, tales como el no tener muchas veces acceso a financiamiento, tecnología, capacitación, información de mercado, poca oferta, entre otros.

En dicho contexto, el desarrollo de consorcios de exportación entre Pyme, surge como una de las alternativas para lograr la participación de estas en los mercados de exportación, compensando los problemas de oferta que tienen las pequeñas empresas y las microempresas.

Según la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (ONUDI), un consorcio de exportación es una alianza voluntaria de empresas con el objetivo de promover los bienes y servicios de sus miembros en el extranjero y de facilitar la exportación de sus productos mediante acciones conjuntas.

Se puede considerar que el consorcio de exportación es un medio formal para la cooperación estratégica de mediano a largo plazo entre empresas que sirve para prestar servicios especializados a fin de facilitar el acceso a los mercados extras especializados. La mayoría de los consorcios son entidades sin fines de lucro.

Debe tenerse en cuenta que en un consorcio las empresas no se fusionan, sino que crean una red para la exportación, conservando su individualidad, para poder continuar operando de manera individual en el mercado interno, en el caso de que sean competidoras.

Al cooperar en el interior de un consorcio de exportación las Pyme pueden lograr:

1) Reducción del riesgo. Al mejorar el acceso de la empresa a información relativa a mercados extranjeros y al orientarse hacia una mayor diversificación de las exportaciones, los consorcios de exportación pueden reducir de manera significativa el riesgo de exportación y de la exploración de nuevas oportunidades comerciales en el extranjero.

2) Aumento de la rentabilidad. En los consorcios de exportación los miembros comparten los gastos administrativos y de promoción, con lo que evitan los gastos de establecer su propio departamento de exportación. Al utilizar en conjunto instalaciones de transporte y de otro orden para fines de exportación pueden lograrse economías adicionales de tiempo y de costo.

3) Ventajas de eficiencia. Al mancomunar recursos financieros y al compartir información y experiencia, los miembros de un consorcio pueden mejorar e intensificar sus actividades de promoción en el extranjero. Además, pueden realizar actividades que las empresas tal vez no puedan realizar por separado, como investigación de mercados y desarrollo de productos. Además, al mancomunarse, las empresas participantes pueden suministrar una mayor diversidad de productos y una cantidad superior que al hacerlo por separado.

5) Acumulación de conocimientos. Las empresas que participan en consorcios de exportación tienen por lo general una experiencia limitada de exportación y se hallan en las primeras etapas de ingreso en el mercado de exportación o expansión.

Al participar en un consorcio de exportación los miembros pueden mejorar su conocimiento de la forma en que han de operar en los mercados extranjeros, la forma de mejorar sus operaciones comerciales en esferas no relacionadas con la exportación y la forma de participar en alianzas.

Es evidente que las empresas pequeñas no tienen, en un principio, la capacidad de atender las demandas de mercado internacional ni conocen las exigencias que se les plantea en un mercado más competitivo.

Por eso es necesario impulsar mecanismos como el de los consorcios, que permiten a las empresas consolidar mayores volúmenes y desarrollar mecanismos de inteligencia comercial, disminuyendo de esta manera los costos individuales del aprendizaje.

Sin duda, es una alternativa para que se incorporen las Pyme en el segmento exportador del país.

Las Pyme urbanas y rurales han contribuido de manera importante a la determinación del crecimiento económico desde las reformas estructurales desarrolladas en la década de los noventa. De acuerdo a estimaciones realizadas por el BID, las Pyme contribuyen con más del 55% a la determinación del PBI global. Si bien, este porcentaje incluye a un número reducido de empresas, debe considerarse que la mayor parte de estas empresas son informales, y por lo mismo no son registradas al realizar el cálculo del PBI.

Publication: Diario Gestion
Provider: Diario Gestión
Date: February 5, 2008

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